La organización de justicia ambiental con sede en Estados Unidos, Azul, advirtió que la fuga generada en la línea de Pemex en el Golfo de México generará daños irreversibles al océano y la fauna marina.
Al respecto, la fundadora y directora de Azul, Marce Gutiérrez-Graudins destacó que la extracción de petróleo del fondo marino representa una amenaza para los ecosistemas y para millones de personas que dependen del mar como pescadores o prestadores del servicio turístico.
“Desafortunadamente, lo que vemos hoy no es ni la primera ni la última vez que esto ocurrirá. Tenemos décadas de derrames en los lugares en que se extrae petróleo del mar. Más que accidentes aislados, los derrames petroleros son habituales”, lamentó.
Agregó que “El Gobierno de Estados Unidos reporta que en los cuatro años después del derrame del Golfo de México de Deepwater Horizon (2011-2014), la extracción de petróleo en el mar causó un total de mil 63 lesiones o daños a personas, 477 explosiones y fuegos, 22 pérdidas de control de pozos, 11 derrames de más de dos mil 100 galones de petróleo (casi siete mil 950 litros), y 11 muertes”.