El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, consideró que el mundo se está destruyendo por tanta violencia, egoísmo y deshumanización; además de que dijo no se cuida la vida ante una pandemia que no puede terminar.
Indicó que la situación de violencia que se vive a diario es compleja, pero lamentó que sea provocada por el mismo hombre.
Dijo que el día de nuestra muerte tendremos que dar cuentas y el desprecio por la vida es una falta grave; pidió que se haga una reflexión, sobre todo ahora en tiempo de adviento, para coadyuvar a la recuperación del tejido social.
Lamentó también la situación que se vive con la pandemia del Covid-19, y pidió por todos aquellos que se siguen enfermando y quienes han perdido la vida en el combate de esta enfermedad.
Aunado a esto hizo el llamado para continuar con las medidas de sanidad y evitar más contagios, pues recordó que ante la cuarta ola de contagios todos somos vulnerables.
«Se los digo cada domingo, tenemos que cuidar nuestra salud, para nosotros los cristianos a los católicos los creyentes, la vida es agrada» dijo.