A través de un número WhatsApp hicieron llegar a los medios de comunicación fotografías y videos del nivel de vida que mantenía dentro del penal de San Miguel el empresario Leonardo Tiro Moranchel, dueño de Grupo SITMA, acusado por fraude a miles de poblanos.
En las imágenes se le observaba que tenía acceso a buenas botellas de licor, su celda simulaba a un pequeño departamento, ventanas, cortinas, puerta, tocador, camas, baño privado, pantallas plasma, consola de video juegos y sin límite de visitantes, incluso sus acompañantes podían quedarse a dormir al interior del CERESO.
Los privilegios para Leonardo Tiro Moranchel ya se terminaron para el dueño de SITMA dentro de este centro penitenciario.
Fue durante el miércoles de esta semana cuando en medio de un fuerte dispositivo de seguridad fue trasladado a un penal federal –el cual aún no se ha dado a conocer-.
Los videos al interior del penal de San Miguel, en donde celebraba sus cumpleaños con alcohol y mujeres, exhibieron el grado de impunidad y corrupción que había en esa prisión desde hace muchos años atrás.
Todo eso se terminó desde hace tiempo, cuando el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, ordenó una “limpia” profunda en el penal y así ocurrió ubicandolo a una celda sin privilegios.
#NotaRoja | Así era la vida de Leonardo Tiro Moranchel, dueño de SITMA durante el morenovallismo. 🤦🏻♂️
Con la llegada de @MBarbosaMX se limpió el penal de San Miguel, se tiraron las "casitas" y los privilegios. ❌
Recientemente Moranchel fue trasladado a otro penal
📹 Archivo pic.twitter.com/01n3BBw6fB
— Sucesos Puebla (@sucesospuebla) March 31, 2022
Archivo fotos y videos: Josél Moctezuma
Se destruyeron todos los “cuartos especiales” que se habían construido al interior de San Miguel para los reos que pudieran pagar fuertes cantidades de dinero para gozar de ciertos privilegios.
Es verdad que los defraudados de SITMA aún confían con recuperar el dinero que perdieron en el esquema fraudulento creado por Leonardo Tiro, sin embargo, eso aún tardará mucho o quizá nunca ocurra.
Pero el responsable de uno de los más grandes fraudes en la historia de Puebla, ya no tendrá más privilegios en San Miguel.
Su suerte se terminó y ahora vivirá en otras condiciones en un penal federal.
