Sofía Rodríguez
Puebla registró uno de los porcentajes más altos de informalidad laboral, con el 70.4 por ciento de la población que trabaja y que no gozan de protección social, como el servicio doméstico, la actividad agropecuaria o subordinados que, aunque trabajan en unidades económicas formales carecen de esta prestación.
Así lo reflejó la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) publicada por el Inegi, correspondiente al primer trimestre del año, en el que Puebla registró el quinto indicador en informalidad laboral más alto del país.
La tasa de informalidad en el estado implica que sólo 879 mil personas ocupadas cuentan con seguridad social, de una población de 2 millones 930 mil que trabaja.
A este indicador habrá que sumar que una de cada tres personas que trabajan lo hacen en condiciones críticas, es decir, que trabajan menos horas a la semana a pesar de su disponibilidad, o más de 35 horas semanales con ingresos mensuales inferiores al salario mínimo, por ejemplo, o hasta 48 horas a la semana por dos salarios mínimos.
En informalidad, la entidad se ubicó detrás de Oaxaca cuyo promedio fue del 81.3 por ciento de la población; de Guerrero con el 78.1 por ciento, Chiapas con el 73.8 por ciento y de Hidalgo y Tlaxcala que compartieron la tasa del 72.9 por ciento.
En contraste, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Baja California, Baja California Sur y Aguascalientes reportaron los mejores niveles, por debajo del 40 por ciento.